Para el resto de la cartera, la tasa de interés será establecida en función de lo pactado entre los intermediarios financieros y sus clientes
En medio de la pandemia más del 50% de la cartera de créditos de la banca fue objeto de reestructuraciones y refinanciamiento en 2020.
Esto se hizo en el marco de los estímulos monetarios dispuestos por el Banco Central y la Junta Monetaria.
En ese sentido, la tasa de interés fija de 8% que se concedió a las personas y a las empresas está vigente hasta junio de 2023.
Para el resto de la cartera, la tasa de interés será establecida en función de lo pactado entre los intermediarios financieros y sus clientes, pero el efecto transmisión será gradual.
Al inicio de la pandemia las primeras medidas del Banco Central estuvieron orientadas a dinamizar los sectores productivos.
La entidad monetaria considera que ya llega el fin de las facilidades de liquidez, pues hay suficiente en la economía para que esta pueda financiarse. Recientemente el Banco Central decidió subir 100 puntos básicos a su tasa de interés de política monetaria como previsión ante la ola inflacionaria.